martes, 27 de marzo de 2012

Ellas

Ellas, sustento de nuestras vidas.

Desde que nacemos nos acompañan, son las que nos sufren para darnos la vida. Nos dan cariño, tienen paciencia, son comprensivas y dulces y sin duda nos dan muchas lecciones de coraje, de la lucha del David que vence a Goliat por el cariño a una vida ajena.

Pilares de nuestras vidas desde antes de nacer, nos llevan dentro preparándonos para la dureza de este mundo al que nunca acabaremos acostumbrándonos. Nos dan la mano para encaminarnos en esta selva hasta que irrumpen en nuestra vida otras mujeres, con la misma disposición a querernos. Son más jóvenes y vienen bajo el pretexto de unas nuevas sensaciones, de un nuevo amor que no conocíamos. Siguen haciendo de madres, nos cuidan y nos vuelven a dar la mano ayudando a escribir guiones de nuestra vida, a seguir por el camino recto.

¿Quién de nosotros no necesita una buena mujer para ser feliz?



ASL (Dedicado a las que nos hacen grandes día a día)

domingo, 25 de marzo de 2012

Un día va la vida... y te sorprende

Era una fría mañana de invierno, el como cada día desayunó y se refugió en su habitación dispuesto a estudiar.

Las horas pasaron entre temas y temas hasta que encendió tuenti, estaba cansado de aquella asignatura que sabía que era imposible de aprobar, y empezó a chatear con su amiga que le propuso jugar con una compañera de clase. No pudo decir no y sin saberlo ahí abrió las puertas de su corazón a una tercera jugadora, desconocida para el aunque las partidas se sucedieron una tras otra sin dar indicios de todo lo que pasaría días más tarde cuando twitter tomó protagonismo con un deseo hacía aquella tercera jugadora para el examen del día siguiente. Ella, sin saber nada, empezó a morir lentamente por aquel desconocido que se comportaba de aquella manera hasta que decidió agregar a aquel chico tan amable a tuenti donde empezó la segunda parte de esta historia.

Las conversaciones entre ambos empezaron a ser casi diarias, el buscaba desde su móvil su nombre constantemente en el chat o incrementaba sus visitas a su perfil, ella solo quería leer sus frases, sus "bonitas" palabras, podía perfectamente estar leyendo sin decir prácticamente nada, adoraba cada minuto que pasaban juntos chateando. Todo había cambiado, el empezaba a verla como más que una desconocida o una cara bonita, empezaba a sentirla dentro de su vida, para ella no era tan fácil, los miedos y terceras personas jugaban su papel, crudo papel para ese "bicho raro" que cuando la vio por primera vez en persona no dudó en decirse "esta chica debe ser mía". Pasados los días, no aguantó y decidió declarar lo que creía que era evidente, que esa tercera jugadora ahora jugaba de titular en su corazón y que pensaba darle todos los mimos, cuidados y confianza que necesitase, que cuidaría de ella como si de su propia vida se tratase... y a día de hoy hace dos meses que empezó a cumplir su promesa, la de quererla todos los días desde que se levantase hasta que se acostase.

Ambos se devolvieron a la vida en aquel mágico primer beso y volvieron a creer en aquello de que los príncipes azules a veces existen y encuentran a sus princesas.


ASL